martes, 3 de mayo de 2011


No tenía ni idea, por eso busqué información, esta me parece “cercana” y entendible, ¡Qué pasote, ¿eh?, y dicen que vivimos en decadencia!(aún literaria y mitológica).

Ménades y Bacantes:
“En la mitología griega, las Ménades son seres femeninos divinos estrechamente relacionados con el dios Dionisio (Baco para los romanos), dios supuestamente originario de Tracia y Frigia. Las primeras ménades fueron las ninfas que se encargaron de la crianza de Dioniso, y que posteriormente fueron poseídas por él, quien les inspiró una locura mística. Esto las contrapone a las Bacantes o Basárides, mujeres mortales que emulan a las ménades, que se dedican al culto orgiástico de Dionisios. No hay unanimidad, sin embargo, en estas acepciones. En muchas fuentes Ménades y Bacantes son sinónimos, entendiéndose por Bacante la acepción latina de Ménade

Literalmente Ménades puede traducirse por "las que desvarían". Se las conocía como mujeres en estado salvaje y de vida enajenada con las que era imposible razonar. Se decía de ellas que vagaban en bandas rebeldes o Thiasoi por las laderas de las montañas. Los misterios de Dionisos, el dios del vino, el misterio y la intoxicación, les llevaban a un frenesí extático. Se permitían dosis importantes de violencia, derramamiento de sangre, sexo y auto-intoxicación y mutilación. Se las representa pictóricamente a menudo ataviadas con coronas de hojas de vid, vestidas con pieles de cervatillo, llevando el Thirsus, (del griego Thyrsoi), una varita con una piña en la punta y adornada con hiedra u hojas de vid, y danzando con el abandono salvaje a la naturaleza primaria. Se supone también que llegaban a practicar en su éxtasis el esparagmos, o desgarro de sus víctimas en trozos tras lo que ingerían su carne cruda (antropofagia)”.

(Wikipedia)

Lo que más me gustó de la expo “Heroínas” (Thyssen):

“Soledad”, Frederic Lord Leighton
Todas las obras de Jules Bretón, sobre todo “La estrella del pastor”(impactante, suaves pinceladas, cálidos colores y dureza en la expresión, herramientas apropiadas, subsistencia, dureza, y su estrella contemplándolo todo.
“Ménades exhaustas después de la danza”, Sir Lawrence Alma Tadema
“Perseo perseguido por ménades” Charles Gleyre ( Precioso, bueno, a Perseo no se le veía muy contento, no :)
“Diana cazadora” Rubens
“Amazona y centauro” Franz Von Stuck (Me encantó, especialmente expresivo)
“Jóvenes espartanas desafiando a sus compañeros” (tierno, delicado, vivo,…) Degas

A ver si, en unos días, puedo ir a ver la segunda parte.

1 comentario:

José Ramón dijo...

Pues sí, el vino, antes de ser un peligro para la conducción, fue un dios. El cortejo de Dioniso incluía no sólo a las ménades, sino también a los sátiros; personificaban respectivamente los espíritus orgiásticos y las fuerzas fecundantes de la naturaleza. Con tales acompañantes no es de extrañar que las fiestas romanas en honor de este dios, el Baco latino, fuesen las bacanales, las cuales solían acabar de una manera que está en el origen de lo que la palabra bacanal significa para nosotros, una desenfrenada orgía.
El cuadro de Degas de los jóvenes espartanos recuerdo haberlo estudiado en la asignatura de Historia Antigua, cuando nos ocupamos de la vida en Esparta. El estado espartano tuvo serios problemas demográficos, lo cual no es sorprendente teniendo en cuenta sus prácticas eugenésicas (al fondo del cuadro de Degas se puede ver el famoso monte Taygetus desde el cual se despeñaba a los bebés que presentaban algún signo de minusvalía o de debilidad); el caso es que esto desembocó en una situación de mayor libertad para las mujeres espartanas que la del resto de mujeres griegas. El cuadro de Degas muestra una situación y unos “modelitos” con perfecta base histórica: el vestido de las espartanas estaba abierto por el costado hasta la cintura, ellas se mezclaban con los muchachos mostrando sus muslos para escándalo de los demás griegos, y muchas jóvenes pasaban en el campo de deportes buena parte de su tiempo; y era frecuente en esa situación la desnudez que se muestra en el cuadro. Además, cada año las espartanas participaban en las gimnopedias junto a los varones, también con esa desnudez que se puede ver en la pintura de Degas. Por cierto, se incluía el baile en dichos juegos. La escena del cuadro, donde al menos una de las muchachas parece increpar o retar a los despelotados varones me hace recordar cierta costumbre que podía resultar más dura para un espartano que su famosa formación guerrera. Resulta que si alguno se pasaba de listillo o de mirón con las chicas, estas tenían cierto derecho a cogerlo y ponerlo como chupa de dómine, burlándose y ridiculizándolo en medio de una representación pública, delante de los reyes, las autoridades y el pueblo. Así que lo que Platón contaba de que la desnudez de las espartanas no originaba conductas lascivas, me resulta verosímil. Menuda le podía caer encima al que se propasara.
Y lo dejo aquí, que el que se está propasando con la extensión del comentario soy yo, que me enrollo más que el papel higiénico...